Domingo 15 de marzo de 2020. El segundo día del Vive Latino también llegué temprano.
La jornada empezó con Girl Ultra, quien tuvo como invitada a Ximena Sariñana en una de sus canciones. Después de un par de canciones fuimos (el tico y yo) a ver a Zero Kill, banda de Benito Cerati.
“Estoy tocando por segunda vez en una semana en el Foro Sol”, dijo el cantante. “¿Cuántos pueden decir eso?” El cantante participó días antes en el concierto #GraciasTotales donde diferentes artistas le dieron voz a las canciones de Soda Stereo junto a Zeta Bosio y Charly Alberti.
De este concierto no voy a hacer mayor comentario. Solo diré que fue un poco anticlimático que un cantante inglés (en un video pregrabado), cerrara el concierto de la banda más emblemática del rock latinoamericano.
No debe ser sencillo ser hijo de una leyenda del Rock. Difícil tarea debe ser distanciarte de la imagen de tu padre (aún más cuando te pareces tanto a él) y hacer una carrera por tu cuenta. Aún asi, Zero Kill brindó al público más conocedor, el cover de una canción no tan conocida de Soda: «En camino» (de cuya letra extraje el titulo de esta nota, por si te estabas preguntando).
Las cancelaciones abrieron un pequeño espacio en mi horario para ese día. Aprovecho para reseñar algunos otros aspectos del Festival afuera de lo musical. En primer lugar, las medidas de prevención. Para el 14 de marzo, primer día del Vive Latino, se habían reportado 41 casos de Covid-19 en México. Ya mencioné que al entrar nos tomaban la temperatura. Yo me ponía nervioso, no fuera a ser que estar cinco minutos al Sol hubiera elevado mi temperatura. Lo que me debía preocupar es que como método para detectar contagiados, al toma de la temperatura se quedaba un poco corta. «Teatro de seguridad«, le llamaría Schneier. Es decir, «medidas de seguridad para dar al público una impresión de seguridad sin mejorar realmente la seguridad real». Más útiles eran los geles antibacteriales localizados en diferentes puntos del Festival. Te tranquilizara, querido/a lector/a que escribo estas líneas, más de dos semanas después del Festival sin haber presentado síntomas. Al final, la mascarilla me sirvió más para protegerme del pesado aire de la Ciudad de México, que de un virus.
Los demás detalles del Vive Latino pueden resultar irrelevantes con el nuevo Coronavirus encima, pero nos arrojan luz de la razón por la que no cancelaron el Festival. Ocesa es un coloso que forma parte de la corporación mexicana más grande de entretenimiento, y el Vive es uno de sus eventos más grandes. Además de las ganancias para las empresas, calculo que el festival genera unos cuantos miles de empleos. El Foro Sol y sus áreas circundantes se vuelven una mini ciudad cultural con restaurantes, exhibiciones de lucha libre, lectura de libros… Y en cada área encontramos vendedores, trabajadores de food trucks, personal de limpieza y seguridad, socorristas…

Joselo Rangel de Cafe Tacvba en una de las lecturas de Libros VL
No pretendo con esto, defender o justificar que el Festival se haya realizado en esas fechas cuando se venía venir la pandemia. Al final, no sería objetivo y que cada quien defiende lo que le gusta y ataca lo que no. Y a mí me gusta ir a festivales. Supongo que tuvimos más suerte que a quienes les gusta ir al futbol o a ver procesiones. Para bien o para mal, creo que los/as mexicanos/as son muy valientes como para dejar de trabajar frente a la amenaza. Todavía queda ver las consecuencias de tanta valentía azteca.
Ahora, ¿qué voy a hacer?, ahora, ¿qué?
Volviendo a la música, a las 16:20 se subió al escenario La Garfield. El año pasado vi a estos mexicanos tocar en Antigua Guatemala y me encantó poder verlos otra vez. Supongo que si hubiera que categorizarlos podríamos decir que es una banda de ska, pero La Garfield dista mucho de otras bandas de este género. En primer lugar, estan liderados desde 2016 por una excelente frontwoman con una voz maravillosa: Sofía Steiner. Las canciones de La Garfield tienden al pop, por las mejores de las razones. Son pegajosas, alegres, y la banda entera derrocha energía al tocarlas, especialmente en vivo. Como buena presentación en el Vive Latino, no podía faltar el invitado especial. El rapero Sabino se sumó para interpretar «When the sun goes down», la única canción en inglés que cantó Steiner ese día.
En el repertorio también sonaron algunas de mis favoritas como «Si tu me quieres», «Love» y «Luna de Plata», además de su más reciente sencillo «Salvaje», que ya suma varias reproducciones en mi Spotify.